En la búsqueda de un hogar, resulta recurrente la duda entre comprar o alquilar una vivienda. Una pregunta que tiene difícil respuesta, pues esta depende en gran medida de las condiciones personales de cada individuo, así como del contexto económico del momento.
Por tanto, para analizar si resulta interesante o no adquirir una vivienda en propiedad, no solo hay que analizar la situación personal de cada uno, sino también la del mercado inmobiliario.
En 2022 la compra-venta de vivienda experimentó una evolución positiva, que se trasladó a un incremento de los precios. Según la sociedad de tasación, TINSA, estos crecieron un 8’8 %, unos 1.1751 € por metro cuadrado. En Valencia este crecimiento ha sido superior al 8 %. No obstante, toda esta evolución va acorde a la inflación, que este año ha crecido una media anual del 8’4 %.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la Comunitat Valenciana experimentó el segundo mayor incremento del precio de la vivienda en el año 2020 ( 1’5 %).
A nivel nacional, el precio del alquiler ha experimentado un incremento del 8’4 % (11’46 € por metro cuadrado). Sin embargo, en las capitales el aumento del coste del alquiler ha crecido en mayor medida. En la zona Mediterránea, el alquiler en Alicante ha crecido un 23’4 % y en Valencia un 20’9 %.
No obstante, el año pasado el Gobierno promulgó una medida que entra en vigor en 2023 según la cual el precio del alquiler no puede subir más de un 2 %. En consecuencia, la rentabilidad de la vivienda como inversión ha decaído, mientras que la de otras alternativas, como los bonos del estado, se ha incrementado.
A su vez, esto provoca que se reduzca la oferta de viviendas en alquiler. No obstante, la oferta de vivienda también es reducida, lo cual colabora en el incremento de su precio.
El Gobierno ha ampliado hasta finales de 2023 el ‘Plan de choque en respuesta a la guerra’ en el que limita en un 2 % la subida del precio del alquiler.
Asimismo, los fondos Next Generation de la Unión Europea van a influir sobre el panorama del alquiler en España. Dicha ayuda contempla 1.000 millones de euros destinados a la construcción de vivienda en alquiler, lo cual aumentará la oferta.
También se encuentra en trámite parlamentario la Ley de Vivienda, que propone revisar los módulos de vivienda protegida para hacer más viable su construcción. Con ello se podrá construir un importante parque de vivienda protegida en alquiler
Por otro lado, hay que tener en cuenta el momento económico de desaceleración que genera incertidumbre respecto a la capacidad de pago de los prestatarios. En consecuencia, el coste de la financiación de la compra de la vivienda se ha incrementado. En este sentido, hay que tener en cuenta que el alquiler es un modelo de adquisición de vivienda más flexible y no está sujeto a la evolución del Euribor.
Además, la inflación ha provocado un encarecimiento del precio de la vida. Esto ha reducido el porcentaje de los ingresos de las familias que se destinan al ahorro. Para comprar una casa es preciso ahorrar al menos un 30 % del coste de la misma. Esto hace de la compra de propiedades un reto frente a la carestía de hipotecas y las exigentes condiciones que requieren.